El Museo Monográfico del
Cigarralejo, ubicado en el interior de lo que fue el antiguo palacio del
Marqués de Menahermosa, alberga la colección donada al Estado por el arqueólogo
e ingeniero de Caminos, Canales y Puertos don Emeterio Cuadrado Díaz con fecha
de 1 de junio de 1986. Dicha colección aparece compuesta por gran cantidad de
materiales arqueológicos que don Emeterio recopiló a lo largo de más de 40 años
de excavaciones sistemáticas e ininterrumpidas (1948-1988) en la necrópolis
ibérica del mismo nombre, exhumando en este periodo de tiempo 547 tumbas
ibéricas con sus respectivos ajuares, es decir, los objetos personales con los
que se enterraban los restos (incinerados) de los fallecidos según el ritual funerario
correspondiente a la cultura ibérica. Como es lógico, los ajuares varían de
unas tumbas a otras atendiendo a una serie de elementos (sexo, jerarquía
social, época...).
La cronología de estos hallazgos aparece encuadrada dentro de un periodo de tiempo bastante amplio que abarca del s IV a.C. al s I a.C. proporcionándonos una información de vital importancia para conocer la evolución de las necrópolis ibéricas a lo largo de estos siglos. La importancia histórica y cultural de los ajuares encontrados aconsejaba la aceptación, por parte del Estado, de dicha donación. Este hecho se hará efectivo mediante la Orden de 21 de abril de 1989, por la que también se crea el Museo del Cigarralejo (de titularidad estatal) para "la conservación, investigación y exhibición de todo, y cuyo objeto específico es el mejor conocimiento de la cultura ibérica a través del estudio de los materiales arqueológicos procedentes del Cigarralejo". Tenemos que señalar, no obstante, que la Gestión es competencia de la Comunidad Autónoma de Murcia.
La cronología de estos hallazgos aparece encuadrada dentro de un periodo de tiempo bastante amplio que abarca del s IV a.C. al s I a.C. proporcionándonos una información de vital importancia para conocer la evolución de las necrópolis ibéricas a lo largo de estos siglos. La importancia histórica y cultural de los ajuares encontrados aconsejaba la aceptación, por parte del Estado, de dicha donación. Este hecho se hará efectivo mediante la Orden de 21 de abril de 1989, por la que también se crea el Museo del Cigarralejo (de titularidad estatal) para "la conservación, investigación y exhibición de todo, y cuyo objeto específico es el mejor conocimiento de la cultura ibérica a través del estudio de los materiales arqueológicos procedentes del Cigarralejo". Tenemos que señalar, no obstante, que la Gestión es competencia de la Comunidad Autónoma de Murcia.
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